HACIA LA ESTATURA DE CRISTO
HACIA
INTRODUCCION
A Dios nuestro Señor sean dadas las gracias. El cual nos lleva de triunfo en triunfo, que por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor fragante de su conocimiento, conocimiento que fue velado a los sabios y entendidos de este mundo, los que creen que solamente a través de la teología llegamos al conocimiento de Dios, la teología puede llegar a ser útil al utilizarla en cuanto al conocimiento básico de las escrituras.
Pero en cuanto al conocimiento de Dios(Juan 17:3), el cual es insondable, solamente penetramos a ese conocimiento solo después de haber llegado a tener un encuentro verdadero con Dios, por medio de su hijo, a través del conocimiento del Evangelio eterno sin distorsiones ni
Alteraciones. Como decía en Gálatas, Pablo no otro Evangelio, sino el verdadero evangelio que conduce a la salvación, somos grato olor a Cristo para los que se salvan, y en los que se pierden olor a muerte, pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios hablamos en Cristo.
No que seamos competentes por nosotros mismos, para pensar algo de nosotros mismos, sino que nuestra competencia viene de Dios.
Estamos en tiempo de apostasía, en que se tuercen las escrituras, se falsifica la palabra, por eso Pedro decía "que debemos desear la leche espiritual no adulterada para que por ella crezcáis para salvación."
Prestemos atención que dice la leche espiritual, no carnal, acomodando lo espiritual a lo espiritual, ah través de los textos Bíblicos perfectamente amalgamados, (trazando bien la palabra de verdad)2 Timoteo 2:15. ,Y meditados a través de la oración pidiendo a Dios sabiduría, para coordinar su palabra (un poquito acá otro poquito allá)Isaías 28:13.,esta es la forma correcta, y aun dice mas no adulterada, no adaptada a una mente carnal, 1de Juan 4:4-5-6.,con inclinaciones de ninguna índole, sino totalmente imparcial, entonces si estaremos hablando de la verdad de Dios, (y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres) Juan 8:32,porque deseamos al fin conocerlo a Él (y esta es la vida eterna que te conozcan a ti único Dios verdadero y a tu hijo a quien tu has enviado) Juan 17:3,la vida eterna la salvación.
Poniendo toda diligencia en esto escudriñando las escrituras, escudriñar en el griego, (la figura es como exprimir un limón, sin dejar nada de su jugo. Para luego, con el corazón lleno de sabiduría, amor a las almas perdidas, o en vía de ser salvas, practicando su palabra, caminaremos en salvación hasta el fin.
Entonces luego si estaremos preparados, como el árbol que da su fruto a su tiempo, y su hoja no cae.
El Señor es el mismo ayer y hoy y por los siglos, hebreos 13:8, ser cristiano no es solo para el pasado, sino para hoy, para siempre jamás, quiere decir que nuestra consigna es Romanos 12:1 y 2, debe transformar nuestra mente a la mente de Cristo Nuestro Señor, según el molde de las escrituras 1 de Corintios 2:16.,poniendo en practica todo lo que aprendemos de ella.
Nuestra meta es llegar a la estatura del varón perfecto, y alguno dirá hermana no es una norma demasiado elevada, El Señor jamás nos va a pedir nada de lo que no podamos dar, Efesios 4:13.
Este es el perfecto plan de salvación, llegar a la estatura de Cristo. Hermanos míos estos mensajes están destinados a hacernos ver, eso de inducirnos a que vaya a Jesucristo, quien podrá darnos el poder que nos hará capaces de cumplir, su palabra, con todas sus exigencias.
El que anda entre los 7 candelabros de oro dice: Te amonesto que de mí compres vestiduras blancas, para que no se descubra la vergüenza de tu desnudez. Dice también "Bienaventurado el que vela, y guarda sus vestiduras para que no ande desnudo" Ago.16: 15.Pablo oro, intercediendo por los Santos para que Cristo habite en sus corazones, por la fe", pero también oro pidiendo que estos anduviesen como era digno del Señor, agradándole en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios: corroborados de toda fortaleza, conforme a la potencia de su gloria, para toda tolerancia, y largura de animo con gozo (Colosenses 1:10,11.)
Que la bendición del Señor repose sobre estas palabras, y de la luz y gracia, que El solo puede dar a los lectores.
Les agradece su inestimable atención, una servidora.
Beatriz. M. R. de Raya.
¿A que nos ha llamado Dios?
Muchas personas concurren a reuniones de iglesia donde se les enseña (quizás)lo que dice
Hay como quienes piensan que hay dos caminos, es decir la vida de repetido pecar y arrepentimiento, de caídas y levantadas, de perseverancia en el camino de la religión que los libre de la perdición, lo cual es diferente a la experiencia del hombre y la mujer santificados que dicen: !con la ayuda del Señor va a vivir una vida santa, sin pecado!. Quiero que Dios santifique mi corazón, para poder siempre hacer su voluntad.
Ay quienes pueden llegar a decir "La santidad es muy buena si uno la desea; pero yo no estoy en condiciones para esto, o para dejar aquello, o lo otro, creo que puedo seguir muy bien tal como estoy. Si usted recibió la bendición de la santidad, me alegro saber que eso ocurrió en su vida."
Hay quienes consideran esto como si quedase a opción de cada uno él adquirirla o no.
Que puede haber cristianos de primera y de segunda, no por eso perder la salvación".Sin embargo al leer ( 2 de Pedro 3:11), vemos algo diferente, ¿qué tales conviene que vosotros seáis?.
"Aquel que os ha llamado es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir, porque esta escrito sea santos porque yo soy santo 1Pedro1:15-16.Salid de en medio de ellos y no toquéis lo inmundo y yo os recibiré 2Corintios 6:17.
Es un privilegio enorme y glorioso tener el corazón limpio; el que el Espíritu de Jesucristo descienda y tome posesión de uno, en nuestro corazón llenándolo de amor, y conservándonos en comunión constante con Dios.
No es solamente un privilegio, sino que es el sagrado deber de todo seguidor de Cristo, el tratar de lograr la entera santificación.
Juan Desleí dijo: a los cristianos que no hubiesen obtenido la limpieza de corazón, o que no la estuvieren buscando con toda vehemencia, no se les podía considerar consistentemente cristianos.
Dios quiere que todos los que invocamos su nombre ,seamos libres de todo pecado, que vivan vidas puras y santas ,que disfrute de la plenitud de la salvación, y que si todavía no están dispuestos a seguir la luz y hacer lo que Dios quiere que hagan, son retrógrados de corazón, y ciertamente se hallan alejados de Dios. Digo pues, es Dios quien nos ha llamado, para que seamos puros santos, y el que desoye este llamamiento, no desoye a hombre ,sino al propio Dios.
Por consiguiente no se debe imaginar, que se puede aceptar o rehusar la oferta que Dios hace de la plenitud de la salvación y seguir contando con el favor de Dios.
Si fuéramos a un negocio donde se venden géneros si pidiéramos tres metros de tela, no quedaríamos satisfechos si nos dieran
Al tratarse del carácter espiritual debemos tener algo con que medirnos y compararnos. Pedro nos da cabalmente esta medida al decir: "Como el que nos llamo es santo, sed vosotros santos". La norma que debemos seguir es el carácter propio de Dios. Si Pedro hubiese dicho: Él es todopoderoso, sed vosotros todopoderosos, o como él es infalible sean ustedes también, sabríamos que esas normas estarían fuera de nuestro alcance, y no podríamos cumplirlas.
Pero si somos verdaderos cristianos, la convicción intima de nuestra alma, nos dice que el ser santo es algo que por medio del poder de Dios y nuestra obediencia, podemos alcanzarlo se trata únicamente de la norma que esta en la mente divina, sino que el propio mundo espera ver que hombres y mujeres que profesan la fe cristiana sean santificados.
El mundo a menudo se ve decepcionado, ya que los nominalmente llamados cristianos no cumplen las normas señaladas por el Señor.
Sed santos en toda vuestra manera de vivir, no hay en esta vida, ninguna relación, ningún deber, ni ningún compañerismo, que no pueda ser santificado por Dios, o que cuente con su sonrisa. Nuestro conversar, nuestro trabajar, nuestro vestir, nuestros matrimonios, amistades, y muchas otras actividades, como predicar, o esparcirnos, pueden , y deben ser santificados, y pueden realizarse estas funciones de acuerdo con la profesión de santidad y la conservación de un corazón limpio.
El cumplimiento de este mandato depende de nuestro estado interior "Sed santos, como yo soy santo", esto significa, no podemos vivir de acuerdo con esta norma, ni podemos cumplir las obligaciones de la vida, si no tenemos santificado el corazón.
En lo referente al fracaso de ciertas personas, que se titulan cristianas, es que creen que pueden cumplir con las santas leyes de Dios, teniendo un corazón no santificado, esto es imposible absolutamente, si digiera lo contrario mentiría. En el cielo se cumple la voluntad de Dios, ¿mas que es lo que asegura ese estado de cosas en el cielo?, se cree que ello es por la ausencia del diablo. ¿o que se debe , porque allí solo hay gozo paz, y satisfacción? o quizás, porque allí no hay tentaciones que crean los hombres y mujeres malos?.No se debe solo a eso, todo el gozo y felicidad y la paz que reina allí se debe a que todo corazón tiene el firme propósito de hacer la voluntad del Padre, y esta de acuerdo con sus santas leyes.
En el padre nuestro, decimos esta frase "Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo". ¿Queremos que verdaderamente así sea ?, a menos que nos pongamos dé acuerdo con esta petición, a menos que cumplamos con estas palabras de Pedro, "Sed santos , porque yo soy santo". Si no hacemos en la practica así , jamás recibiremos respuesta a esta oración". Sinceramente.
Beatriz M. R. de Raya.
"CONSAGRACION"
"Presentad vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo agradable a Dios, que es vuestro culto racional Rom.12:1. De entre aquellos de los que amamos a Dios, con todo nuestro corazón, y deseamos permanecer en su reino, no creo que haya diferencia de opiniones en cuanto al deber que tenemos de consagrarnos enteramente a su servicio.
Él tiene todo el derecho de pedirnos lo que nos pide, por consiguiente lo que nos corresponde es acatar, sin vacilaciones lo que él ordena.Todo siervo de Cristo debe tener la plena convicción, y estar plenamente persuadido que le pertenece a Él, y decir "comprado es por precio" glorificando a Dios en su cuerpo y en su espíritu, los cuales son de Dios, 1.Corinto.6: 20.
Pero ocurre, que aunque muchos declaran esto en palabras, cuando se trata de ponerlo en practica , son pocos los que responden al pedido del Maestro, pocos son los que consagran su vida a la devoción y al servicio de Dios.
Concurrir a reuniones, cantar himnos, y de unirnos en oraciones, plenas de promesas al Señor, de sublimes sentimientos con ojos cerrados y manos levantadas, muchos prometiendo que no vivirán mas para sí mismos, mas terminada la reunión, cambia el ambiente y se presenta el momento de cumplir el deber, entonces se echa de ver, que dicha consagración es mero sentimentalismo, pues se disipa como la nube temprana o como el roció del amanecer, Oseas 13:3.
Debemos comprender pues que, la verdadera consagración es algo practico.
A la gente le gusta decir: " Yo soy del Señor" mas cuando el Señor quiere emplear lo que es suyo! Qué lerdos son en obedecer!, Cuan lenta en moverse es la lengua que habia dicho que habia sido dada al Señor; Cuan cansado se encuentra el cuerpo cuando el Señor le pide que haga algún servicio, quizás también llegue a decir: Lucas14: 18 al 24.O bien el temor de que consecuencias traerá mi consagración, y así todo esto acaba con el incumplimiento de los votos que se hicieron, la verdad que muchas de las consagraciones que se hacen significan mucho en general y nada en particular, vanas palabras, nubes sin agua, árboles sin fruto, y ningún resultado de los votos que se han hecho.
Tal vez nos confesemos seguidores de Jesús, sin sublimizarnos, pero él lo dijo claramente, si alguno se niega a sí mismo toma su cruz diariamente y me sigue, este solo será mi discípulo, este solo será un verdadero creyente, y servidor del Señor. Lucas 9:23.
La verdadera consagración se manifiesta por medio del trabajo que para el Señor realizamos, cuando nadie nos puede reconocer, sino el que se hace por amor cuando solo Cristo puede vernos y recompensarnos.
El alma noble desempeña su labor, la cual quizás no tiene el esplendor que generalmente se hace gala, pero el alma sigue haciendo su deber con la fortaleza que Dios le da, esta es la clase de consagración que agrada a Dios.
Debemos tener presente que, la verdadera consagración es total.
Recuerdo un joven que pasaba por raptos espirituales al hablar acerca del amor que tenia por las almas, y que deseaba que lo envíen al extranjero para cumplir alguna misión, le dije que hacia por las almas que diariamente necesitaban salvación alrededor del, de su casa ,de su trabajo, etc., le pregunte, ¿que hacia para guiar a esa gente al salvador?.Pero este joven no creía que su consagración era para realizar deberes comunes de esa clase, ni tenia nada que ver con la vida que vivía diariamente, le pregunte también que clase de conversaciones sostenía con sus compañeros de trabajo entre horas, y no supo que decirme.
El hecho que va a las reuniones, sé tener una posición ministerial en la iglesia, ¿podríamos llamar a eso consagración?.
Les aseguro que la verdadera prueba de la consagración y devoción al Señor, no consiste en los cargos de la iglesia, sino que se demuestra en la entrega incondicional y absoluta a Dios, y a los intereses de su reino, la consagración en las cosas grandes no redimirá el descuido que se hace en lo pequeño, la consagración real y verdadera es cuando abarca todo, debemos servir al Señor, en lo grande como en lo pequeño,"todo lo que le viniere a la mano lo hace según sus fuerzas, sabiendo que es para el Señor. Eclesiastés 9:10.
Nuestra consagración debe abarcar todo el tiempo, teniendo en cuenta, la consagración hecha con el alma, es algo que da gozo, es erróneo pensar que la entera consagración a Dios trae melancolía , tristeza, y que trae aparejada incómodos deberes y cargas, esta es una sugestión inspirada por el diablo, que es mentiroso desde el principio, el alma enteramente consagrada rebota esa mentira, y al Señor dice: " El hacer tu voluntad Dios mío, me agrada (Salmo 40:8." Mi comida es que haga la voluntad del que me envió" Juan 4:34.
El Señor dijo: Mi yugo es fácil y ligera mi carga. El amor hace que sea fácil , su carga es la carga del amor , su yugo también es el yugo del amor.
El amor hace que todo sea fácil, y todo superable, al pecador le parece el yugo de Cristo intolerable y la carga insoportable. Pero aquellos que penetramos en el secreto del maestro, nuestro yugo es signo de libertad absoluta, y nuestra carga de alas al alma.
Esta es santidad batalladora, consagración, devoción en acción, es ver todas las cosas con la mente de Cristo, el perfecto amor es el que disipa todo miedo, este esclavo no teme a su amo, pues sé gloria en hacer su voluntad, no se preocupa por su propia vida Hechos 20:24, los intereses de su Señor son sus intereses, no tiene ningún otro interés que los asuntos del reino.
La mayor parte de las penas y desilusiones que sufre el hombre se deben a las ambiciones, a la codicia, al deseo que se les aplauda, al temor al que dirán, y cosas semejantes; mas cuando crucificamos esa vida egoísta y vivimos únicamente para Dios, nadie puede privarnos de aquello que es de mas valor, aunque algunos nos digan" Sabemos que eran pobre" Ago. 2:9, oímos al Señor decir: "yo sé que eres rico", Cristo nos revela que es nuestro amigo, y aunque no lo veamos con los ojos materiales, El se nos revela a cada instante de nuestra vida"
por la fe nos regocijamos con gozo indecible y glorioso" 1 Pedro 1:8, recordemos lo que dice Juan acerca de esa piedrita blanca que se le dará a todo aquel que venciere. En esta estaba escrito un nombre nuevo que nadie sabe sino únicamente a aquel que lo recibe Ago.2:17.
El gozo que da servir al Señor, con todo el corazón es algo así, nadie sabe lo que es sino aquel que lo posee, pero hay miles que testifican diariamente acerca de esta realidad.
¿Es Usted enteramente consagrado?, Dé todo corazón sin reserva alguna? ¿ Se ha decidido ha hacer cualquier cosa con tal de que sea para la gloria y honra de Dios?.Si no lo ha hecho hasta ahora . "Le ruego por las misericordias de Dios que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo santo agradable a Dios, que es vuestro culto racional. Rom.12:1.
"POR SUS FRUTOS LOS CONOCEREIS"
El verdadero secreto o principio, de la vida cristiana, se resume así; Lucas 6:43 -44. No es buen árbol el que da malos frutos, ni árbol malo el que da buenos frutos. Porque cada árbol se conoce por sus frutos, pues no se cosechan higos de los espinos, ni de las zarzas se vendimian uvas.
Hay muchos que creen a la inversa. Asumen deberes religiosos , cantan himnos, hacen largas oraciones, hablan bonito, algunos adoptan cierto vestido especial, hacen votos, asumen modales religiosos, tratan de tener bastante conocimiento de
lo que esta adentro tiene que salir forzosamente, y no se puede sacar lo que no existe.
Jesús expone con toda claridad, esta verdad acerca de los hombres, empleando para ello la figura de un árbol.
Jesús emplea uno de dichos ejemplos: " por sus frutos los conoceréis, no se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos, (Mateo 7:16. El árbol se conoce por la clase de fruto que produce, es la manera que comúnmente se identifican los árboles.
Personas expertas en botánica, pueden reconocer los árboles por la corteza, por las hojas, por las flores hasta por su aspecto en general, pero a la mayoría le es imposible hacer lo mismo, me he encontrado con personas que arguyan sobre cierto árbol, pero cuando el fruto cuelga del árbol en las ramas ya no queda mas que echar de ver de que clase de árbol se trata.
Se puede decir cuando es un manzano, un peral, un ciruelo, una higuera, o un limonero , jamás podríamos al contemplar su fruto equivocarnos. Esto se aplica en figura, en el carácter de las personas. Se nos conoce y se nos juzga por la clase de frutos que damos, en Gálatas cap. 5 encontramos un bosquejo a la naturaleza humana, leemos manifiestas son las obras de la carne podríamos decir los frutos de la carne que son , adulterio, fornicación, inmundicia, disolución, idolatría, hechicería, enemistades, pleitos, celos. iras contiendas disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, y cosas semejantes a estas, de las cuales os denuncio que los que hacen tales cosas no heredaran el reino de Dios. Mas el fruto del Espíritu es: Caridad, gozo, paz, tolerancia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza, o sea dominio de uno mismo, Gálatas 5:19-23.
Cuando nos chequeamos, hacemos un análisis profundo en nuestro corazón de todas estas cosas , no aplicándolas a los demás sino a nosotros mismos , y llegamos a ser consientes de lo que necesitamos quitar de los frutos de la carne, y echamos de ver lo que tenemos que adquirir los frutos del Espíritu, frutos de una planta saludable, sin plagas ni bichos, entonces así solamente midiéndonos con esta vara de la palabra, obtendremos el resultado necesario para limpiar nuestra vida de impurezas de la carne, y una vez limpios totalmente, ir agregando y haciendo frutos de arrepentimiento dignos, y dando frutos de conversión verdadera.
No podemos decir que somos santificados totalmente, mientras no seamos liberados de las obras de la carne y de los frutos de esta
y produzcamos en abundancia los frutos del espíritu, nos conocen por nuestros frutos. Profesar santidad sin dar los correspondientes frutos, no es de provecho alguno, es como el árbol al cual se acerco Jesús, y encontró hojas solamente, lo maldijo y se seco.
Supongamos que nos encontramos con un hombre que dice "yo soy salvo", pero al tratar con las personas, dicho hombre falta a la verdad, todo esto nos demostraría que este hombre no es realmente salvado.
Una mujer dice, yo tengo el corazón limpio, pero si vemos a esta mujer que le dominan los deseos de la carne, los apetitos corporales ,y le oímos un lenguaje impuro, o procede de manera dudosa, aunque muchos quisieran ser generosos respecto a ella, quedaría demostrado que su estado de santificación es falso.
Muchos se podrán poner de pie, hablar de la santificación, pero en su corazón tiene iras, contiendas, y chismes, todos dirán no importa lo que hable de la santificación, o lo que diga a cerca de sí misma, esa persona necesita la bendición de la entera salvación.
Si tenemos cualquiera de las manifestaciones de los frutos de la carne, examinémonos, entonces descubriremos que el fruto es malo, entremos en el cuarto postrémonos de rodillas, pidamos perdón a Dios, pidiendo que nos libre de ese pecado, y así nos dará el poder que tanto necesitamos para limpiarnos, que nos santifique y unja con su Espíritu Santo, para que en vez de dar los frutos de la carne, todos puedan ver que damos los frutos del Espíritu.
No digamos que la norma es demasiado elevada, lo que ocurre que nuestra experiencia es demasiado baja, lo que se requiere no bajar el nivel, sino "elevarlo".
Dejemos que Dios tome total posesión de nuestro ser, y el Señor ampute la dificultad que nos afecta, tratando de que el Espíritu del Señor nos invada el alma y fructifiquemos, en toda palabra y obra, para gloria de Dios Padre y de nuestro Señor Jesucristo, amen.
"CRECIMIENTO ESPIRITUAL"
"Creced en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo" 2 Pedro 3:18.
Sabemos que la experiencia espiritual se distingue por ciertas crisis que, algunas veces son como terremotos o grandes marejadas, por otra parte es imposible detener las leyes del desarrollo espiritual, estas tienen que seguir, constantemente su curso.
Decimos que la conversión es una crisis , porque en un instante la persona se convierte, y pasa de muerte a vida, de las tinieblas a la luz, o para usa mas exactamente las palabras de nuestro salvador nace de nuevo, este cambio es indispensable para que la persona pueda entrar en el reino de Dios, luego viene llegando otra crisis" la adquisición de un corazón limpio ", esto ocurre cuando el alma se consagra sin reservas de ninguna especie, al servicio de Dios, y sabe por la fe que la "sangre de Jesucristo limpia de todo pecado", podrá pasar un considerado tiempo entre el nuevo nacimiento, y poder llegar a este punto, pero al ocurrir lo primero debe ocurrir lo segundo a consecuencia, desde ya hablando de permanecer en obediencia y en crecimiento esto debe ocurrir antes de obtener "La santidad sin la cual nadie vera al Señor". Ahora bien al llegar a ese punto se puede decir."Yo soy convertido, hijo de Dios, ahora que obtenido la bendición de un corazón limpio no necesito nada mas, erróneo es pensar así, porque no hay nada más importante que el perseverar en el progreso o avance de nuestra vida divina, en las enseñanzas de las Escrituras, se encuentra la exhortación de Pedro. "Creced en la gracia, y en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo".
Pablo decía acerca de esto”, En Él reside toda la plenitud de
En
Dice añadid (ejercitad) a vuestra fe, virtud, a la virtud, conocimiento, al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, paciencia, a la paciencia, piedad, a la piedad , afecto fraternal, y al afecto fraternal , amor, porque haciendo estas cosas no caeréis jamás. Estas son las raíces profundas que no dejan caer al árbol.
El hortelano estudia su tierra, la clase de productos que podrá obtener de ella, y la semilla que dispone, se deshace de las plantas silvestres, de los espinos, y de otras plantas ponzoñosas, a fin de plantar para que todas se desarrollen bien, en el terreno de nuestro corazón, sucede exactamente igual, debe ser purgado de toda mala hierba, raíces de amargura, y de todo lo que impide el buen desarrollo y crecimiento, de todo lo bueno, las cosas malas desarrollan rápidamente, en el jardín de la naturaleza humana, pero si estas se desarraigan, y se siembra semilla santificada, se podrán cultivar plantas santas.
Los mandamientos de nuestro Señor Jesucristo, indican que deben desarraigarse, toda iniquidades del alma, y cultivar aquellas cosas que son buenas y que producen paz en nuestro espíritu, cualidades semejantes a las de Cristo, tales como el amor, el perdón ,la paciencia, la devoción y el sacrificio, de amor hacia nuestro prójimo. Todas estas cosas deben crecer se hemos de ser a como Dios nos llamo.
Debemos buscar el crecimiento en la gracia, la obediencia, y la habilidad en el servicio de Dios. Si un árbol crece satisfactoriamente, veremos en el tres cosas, el crecimiento de las raíces, las ramas, y el fruto. En el crecimiento de las raíces, estas deben arraigarse profundamente, mas y más hondo cada vez, a fin de poder asirse a la tierra de la cual se extrae sustancias, que lo nutren, si no ocurre esto, el propio peso del árbol lo hará caer a tierra, y si no cayere solo, el primer viento fuerte que lo azote lo arrancara de raíz.
Lo mismo ocurre al tratarse del alma y del carácter de una persona. Por debajo de la superficie debe haber una profunda raigambre, una profundización en las cosas y principios espirituales, esa relación y comunión intima con el Señor, sin las cuales no podemos resistir las tempestades ni las candentes pruebas de la vida .El pueblo de Dios se encontraba atribulado y en peligro, Dios permitía que pasara por esta prueba con la siguiente explicación:"Tornara echar raíz abajo, y hará fruto arriba" (2 Reyes 19:30), no es difícil comprender el principio que sustentan estas palabras; debemos cultivar una base espiritual con raíces, de no ser así nuestra creencia será superficial sin profundidad, y como la parábola de la semilla no teniendo profundidad en la tierra , y teniendo raíces muy pequeñas, se secaran. Esto significa crecer en secreto, en lo intimo para con Dios, y esto nos recuerdan las preciosas palabras de Jesús: "Cuando ores, entra en tu cámara, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que esta en secreto, y tu Padre que ve en secreto, té recompensará en publico, Mateo 6:6.
Hay muchas clases de oración, pero esta se refiere en un exhaustivo, tete a tete, con nuestro Padre Celestial, a fin de poder examinarnos en un chequeo general, resolver todas aquellas cosas que tenemos pendientes con Él, con nosotros mismos y con los demás.
Nos referimos también al crecimiento de las ramas. Fácil es comprender el crecimiento del tronco, y las ramas del árbol, se eleva mas y más alto y su copa se ensancha.
Lo mismo ocurre en el crecimiento en la gracia y el desarrollo del carácter (Lucas 2:52. La adquisición del poder necesario para resistir el mal y para realizar lo bueno; para tener fuerzas necesarias para decir "Si" y "No", para tener fuerzas de manera que podamos cumplir, con nuestro deber, y sufrir trabajos como fieles soldados de Jesucristo."Significa extender nuestra esfera de acción a fin de ayudar y bendecir a otras personas, que buscan la salvacion. El Bañan, es un árbol que crece en el oriente, nos presenta una ilustración, de lo que venimos diciendo. Su tallo crece, y sus abundantes ramas, crecen y cuelgan hasta tocar la tierra, donde prenden y echan raíz, y así repiten el proceso de extensión hasta cubrir un extenso trecho del terreno,
y las aves van, y hacen nido bajo sus tupidas ramas, del mismo modo puede ocurrirnos a nosotros , al principio nuestra influencia puede ser mínima, y él circulo que la abarca muy limitado, pero si la cultivamos con paciencia y sabiamente con prudencia, crecerá y se extenderá hasta cubrir un extenso trecho del terreno, hasta tocar gente nueva con renovado poder, y muchas bendiciones.
La queja del veterano predicador fue así: reprocho a la gente que cantaba, ájala tuviera mil lenguas para alabar a mi Señor, y sin embargo no emplearon una sola, la única que tenían para testificar de su Señor.
Como un hermano muy joven, con mucho entusiasmo que conocí que quería ir a
Finalmente el crecimiento se evidencia por los frutos, Él quiere que su pueblo no sea estéril como la higuera que solo daba hojas, el Señor la maldijo y se seco, refiriéndose a la rama que esta adherida al tronco, dice que cuando se la poda , da mas fruto. Observemos el orden,"Lleva fruto, mas fruto, mucho fruto, y "fruto que permanece". Preguntémonos a que estado hemos llegado nosotros, y con toda perseverancia tratemos de fructificar mas y más.
Lo mejor de toda planta y de todo, árbol es su poder reproductivo, cuya semilla esta en si, y por consiguiente lleva involucrada la facultad de multiplicarse.
Por eso entonces seremos, felices como el árbol plantado junto a arroyos de agua, y dando frutos hasta en edad avanzada, frutos hasta el final, este es mi testimonio, y nuestro ferviente deseo de los que amamos a Dios.
Beatriz M. De Raya.